Es verdad que de los errores se aprende pero no está de más tomar precauciones para evitar cometerlos. Si estás pensando en emprender o ya lo haces y le tienes miedo al éxito o al fracaso, nuestra recomendación es simple ¡pon manos a la obra!, no dudes de tu capacidad para hacerlo y enfrenta los problemas. Los tips que te daremos a continuación te serán de gran ayuda para alcanzar tu objetivo.
Pasar por alto la ley
Muchos de los emprendedores dejan a un lado las leyes omitiendo los procesos legales que son importantes cumplir. Pasar desapercibido no siempre funciona, puedes tener serias consecuencias por tratar de omitirlas, así que te recomendamos tener todos tus permisos y papeles en regla para evitar problemas con la ley. La intranquilidad no te perseguirá e inclusive podrás gozar de los derechos que te corresponden.
Crecimiento fugaz
¿A quién no le gustaría crecer más rápido de lo posible sin que nos cueste trabajo? Aunque no lo creas puede resultar ser un gran error. Es importante no acelerarnos tratando de saltarnos las etapas que debemos seguir, ya que las consecuencias que podrían surgir son desplomar el negocio con grandes pérdidas de dinero, clientes y más. Así que tómalo con calma, emprender toma tiempo, constancia y paciencia. ¡No te desesperes!
Falta de optimismo
No es bueno ser optimista en exceso pero tampoco pesimista, lo correcto es encontrar el equilibrio adecuado donde puedas ubicarte en qué etapa o punto de tu negocio estás sin que te emociones de más haciendo locuras que aún no estén a tu alcance. Con esto no te queremos decir que seas pesimista, concéntrate en tu objetivo y no despilfarres en algo que exceda tu presupuesto.
Elige bien tus socios
Escoger un buen socio no es una decisión que debas tomar a la ligera, la mayoría de los fracasos en las empresas se dan por las estafas que se dan entre los mismos socios o por la falta de comunicación y buena relación entre ellos. Es importante separar la amistad del trabajo, así que si quieres evitar malos ratos considera bien si tu equipo te será de gran ayuda o solo ocuparán un espacio más en el negocio.
Dale valor a tu trabajo
Debes aprender a valorar el desempeño y esfuerzo que inviertes en tu trabajo, cuando somos principiantes es muy común que nos dé miedo cobrar el verdadero valor para evitar ser rechazados y lo malo es que no solo perdemos dinero, sino que también somos una presa fácil para los clientes y proveedores que podrían aprovecharse de nuestra inseguridad. No permitas que esto te controle y dale a tu trabajo el valor que se merece.
No dependas de nadie
Tanto en la vida como en el trabajo nunca es bueno ser dependiente de alguien o de algo, es recomendable tener siempre un plan B e inclusive un plan C. Con el paso del tiempo tu capacidad de liderazgo irá aumentando y más vale estar preparado para cualquier circunstancia que se pueda presentar. Solo ten confianza en ti, ya verás que lo harás excelente.
Ahora que ya conoces los errores más comunes que se cometen a la hora de emprender, pon estos consejos en práctica y decídete a emprender tu negocio. ¡Te deseamos mucho éxito, tú puedes!